Sonidos de América Latina - VOL 39 - CAIFANES "El nervio del volcán" (1994)

Sin duda Caifanes, y posteriormente Jaguares, son de lo mejorcito del pop mexicano aunque rozando el pop comercial como Zoe, algo que se podría asemejar a lo que en España ocurre con Lori Meyers, Love of Lesbian.... empiezan como bandas indies pero al final el mainstream les abraza y empiezan a sonar más de lo debido en radioformulas.
Lo sorprendente es que por imagen y algún que otro tema o riff de guitarra también se les ha comparado con los Héroes del Silencio, y mira que lo intento pero no los consigo comparar mucho.

Caifanes con solo 4 discos se forjó un nombre en el rock mexicano, pero al contar con dos líderes de fuerte carácter, hizo que ya en el tercer disco hubiera deserciones. Curiosamente como trió hicieron este "EL NERVIO DEL VOLCAN" y fue su mayor éxito.
Aunque también fue su despedida pues ya no se aguantaban más Saul Hernández y Alejandro Markovich y sucedió que este último abandonase la banda, y Saul decidiera no seguir como Caifanes y crear Jaguares, de los que en algún momento hablaré en esta temporada.

La mayor habilidad de esta banda fue la facilidad para crear grandes melodías pegadizas por lo que el número de escuchas medias para pillarlos el punto se reduce considerablemente con el de otras bandas latinoamericanas.

Esta es la introducción que hace wikipedia sobre ellos:

Caifanes es una banda mexicana de rock que estuvo activa de 1987 a 1995 y que volvió a escena a partir de 2011.²​

La banda empezó como un cuarteto conformado por Saúl Hernández (guitarra y voz), Alfonso André (batería), Sabo Romo (bajo) y Diego Herrera (Teclados y saxofón), lanzando en 1987 el álbum debut Caifanes. En 1988 se unió Alejandro Marcovich (guitarra líder) y, estructurados como quinteto, publicaron los álbumes Caifanes. Volumen II (mejor conocido como El diablito) y El silencio. Durante 1993 Romo y Herrera dejarían la banda y los miembros restantes (Ya como un trío) publicarían el cuarto álbum, El nervio del volcán. Eventualmente, diferencias entre Hernández y Marcovich llevarían a la desintegración del grupo en 1995. Hernández continuaría con el proyecto Jaguares, el cual incluiría piezas de Caifanes además de nuevo material. Finalmente, en 2011, tras una reconciliación con Marcovich, Hernández formalmente reviviría Caifanes como quinteto. Eventualmente, sin que se presumieran más peleas internas, en 2014 un comunicado anunciaría que Caifanes regresaría al cuarteto original sin Marcovich.³​

Teniendo como origen Las insólitas imágenes de Aurora, Caifanes emergió de la escena local mexicana como parte de la campaña difusora denominada Rock en tu idioma a finales de los años ochenta.⁴​ En dicho tenor, dos de sus canciones (Antes de que nos olviden, y Será por eso), están consideradas dentro de las 100 mejores (musicalmente) del rock mexicano.⁵​ Cinco más de ellas (Afuera, La célula que explota, Nubes, No dejes que... y Viento), se encuentran dentro de las 120 más representativas (comercialmente) del rock hispanoamericano.⁶​

Miembros

• Saúl Hernández – voz, segunda guitarra rítmica en «El año del dragón»
• Alejandro Marcovich – guitarra
• Alfonso André – batería y percusión

Colaboraciones

• Federico Fong– bajo
• Stuart Hamm– Bajo sin trastes en «Quisiera ser alcohol»
• Yann Zaragoza– piano, órgano Hammond y teclados
• Lenny Castro – percusiones
• Jerry Hey – trompeta
• Jerry Goodman – violín eléctrico en «Pero nunca me caí» y «El animal»
• Graham Nash – armónica en «Pero nunca me caí»
• Jeffrey Marty Vanston – sintetizador en «Aquí no es así» y «Ayer me dijo un ave»

Sorpresa para mi, que buscando traerles una buena reseña de este disco, he tenido que encontrarla precisamente en ELPORTALDELMETAL, web muy recomendable y de la que alguna vez he acudido a ella, pero que me sorprende que hagan este gran reportaje sobre un disco que de Metal tiene muuuuuyyy poquito.
Eso sí, la crítica aqui os la dejo porque merece la pena.

Ante todo siento si no me paso mucho a comentar en este maravilloso portal, pero me mudé de ciudad y por un tiempo no tendré internet. Aunque os leo a menudo y disfruto de vuestras críticas.Hoy que tengo un ratito voy a hacer una crítica.

No sé si visitarán muchos latinos este portal, desde aquí les animo a hacerlo, y lo hago con la crítica de una banda mexicana y un disco que me encantan, CAIFANES. Al parecer fueron algo así como los héroes del silencio aquí, con los que por cierto guardan muchas similitudes.De entrada empezaron como banda de pop gótico, endureciendo el sonido disco a disco, sus letras son también cripticas, y abusan de las metáforas, aunque en este caso las letras de Saúl Hernández (cantante y compositor), no son tan ambiciosas y pretenciosas como las de Bunbury, sino que usan un lenguaje más sencillo, más cercano quizá al tipo de letras de el último de la fila, aunque reconozco que no es una buena comparación. Claro que existen aún más diferencias entre héroes y caifanes, pero al ser del mismo tiempo, y ser dos bandas que revitalizaron el rock en sus respectivos países, me he permitido la comparación.

Empezaron con un disco de pop gótico al estilo de the cure, aunque en él se encuentra la negra tomasa, versión de una cumbia que fue un gran éxito, a partir de aquí entró en escena Alejandro Marchvich, guitarra argentino, con el cual, el sonido de la banda ganó enteros, su siguiente placa, fue una especie de rock pasional al estilo U2, emotivo y épico, gran disco también, en el que incluían la celula que explota, himno generacional del rock mexicano, y la que marcaría el devenir de la banda, la mezcla del rock , con elementos de la enorme cultura y folclore americanos, ya que en dicha canción, se mezcla el rock con arreglos mariachi, si si, como lo leen, y encima es genial.Su tercer disco fue el más ecléctico, el silencio, una obra maestra , que quizá algún día me atreva a criticar. Y por último el nervio del volcán, el más poderoso, y para mi , el mejor, el avalancha de esta banda, para que os hagáis una idea, aunque el último disco de héroes es más poderoso y hard rockero que éste.Con estos 4 discos, se convirtieron en una autentica leyenda al otro lado del océano, siendo una de las bandas más grandes de su tiempo.

Yo voy a hablar del nervio del volcán , estamos hablando de una obra maestra del rock latino, y cuando digo latino, no digo maná, juanes y cosas por el estilo, que usan clichés muy manidos y poca inspiración. En caifanes era distinto, no respondían a clichés, sino que fluian ciertas influencias de forma natural, todo encuadrado dentro de un prototípico álbum de rock.
Estamos ante una joya del rock hecho en castellano, y al que os animo que dediquéis una escucha. Es su disco más rockero, incluso hard rockero.

El disco abre con todo un himno del rock en castellano como es Afuera, un punteo nos da la bienvenida , y nos adelanta quién será el verdadero protagonista del disco, el gran Alejandro Marcovich y su guitarra, entra la batería y la cálida voz de Saúl entonando una letra rara, como todas las de caifanes, de las que tú le sacas el significado, y un estribillo coreable, con coro gritando lo de Afueeeeeeeeeeera, se te mete en la cabeza para siempre, pero eso no es lo mejor del tema, que va, en medio hay un solo maravilloso, no técnico, atmosférico, que hubieran hecho Pink Floyd si fueran mexicanos en vez de ingleses, el sólo es étnico, jugando con sonoridades prehispánicas, de las culturas indígenas, acompañada por unas percusiones del mismo tipo, para luego arrancar de nuevo con el estribillo de forma poderosa. Impresionante manera de abrir el disco.

Le sigue Miedo, arranca poderosa la guitarra con un buen riff, de connotaciones latinas, y eso es lo que tienen caifanes, lo latino sale casi de forma natural, encuadrado perfectamente dentro de su rock, unas estrofas con metáforas bastante violentas a veces(por las ánimas de niños enjuiciados....)desemboca en un dulce estribillo, también pegadizo, de nuevo sobresale el trabajo de Marchovich, que se destapa con un buen solo, de nuevo sonando latino, como a música popular pero de manera bastante rockera, el único pero es que su guitarra a veces suena demasiado chillona en vez de potente, termina el solo y con él la canción.

Aquí no es así, una de mis favoritas, muy política, aunque siempre con el uso de las metáforas, con un riff-punteo muy latino y rockero, bellas estrofas acaban explotando en un puente cantado a coro de una manera muy etérea, casi susurrante, para acabar en un estribillo donde el protagonista es el impresionante punteo de Marchovich, sencillo pero con un feeling de la hostia, todo aderezado por percusiones raras, no las manidas percusiones del pop –rock latino comercial, un solo de nuevo que parece del folclore popular(¿salsa?) yo que se, lo escuchas y sabes que eso no lo ha hecho un anglosajón, habrá a quien no le guste, quien rechace de plano todo lo que no lo haya inventado Jimmy Page, pero el tema es buenísimo, por lo menos para mí, repito rock latino, pero amigo que calidad.

La cuarta canción del disco es una balada acústica, ayer me dijo un ave, la guitarra acústica y el colchón de teclados, (presente en todos los temas, a pesar de que aquí ya no estaba diego Herrera, el teclista original de la banda)junto con la lastimada voz de Saúl hacen de este tema un joya, una canción cuyo único calificativo puede ser el de bonita, una preciosidad.

Hasta que dejes de respirar, a mi me parece muy zeppeliana, un medio tiempo con una introducción muy mística y oriental, en las primeras estrofas desaparecen las guitarras, solo las percusiones y un buen trabajo de bajo, acaba un estribillo sugerente, con unos interesantes punteos, luego la guitarra acompaña, al resto del tema, con un solo incluido, ni que decir tiene que el tema va sobre sexo, me encanta, muy mística y sugerente.

Y si hubiera que definir el hard rock latino, la canción sería aviéntame, poderoso comienzo, con hammond incluido,punteo y percusiones latinas, pero también poderosas y rápidas, una letra plagada de desesperación y negatividad, y un estribillo donde el punteo se diluye en otras guitarras ,teclados percusiones y una frases épica, que le sigue el sólo marca de la casa, muy bueno, no es Van halen pero el tipo tiene talento, de nuevo se repite la estructura aunque en la siguiente estrofa después del estribillo, la guitarra desaparece dejando sólo las percusiones y la voz, para ir apareciendo como surgiendo desde lo más profundo, de nuevo el estribillo y el tema(temazo más bien), acaba con Don Alejandro soleando a diestro y siniestro.Hasta aquí el disco es absolutamente perfecto, a continuación baja el listón, subiéndolo en ocasiones, aunque rayando todo a un nivel increíble.

El animal es un tema muy cañero, que empieza potente con un gran riff, que desmerece por lo comentado antes, la guitarra suena más chillona que potente, otra producción le hubiera hecho ganar muchos enteros, aunque tal como está, está genial , potente con buen estribillo, y de nuevo , con un gran trabajo de guitarra, un buen tema.

Quisiera ser alcohol es un tema raro, de marcada influencia jazz, sin guitarras, una balada lastimosa, a algunos les encanta, un gran tema, aunque a mi no me termine de llenar, aunque ojo al maravilloso saxofón que lagrimea durante toda la canción.

Aunque sea una canción semidesconocida, pero nunca me caí eleva,para mi, de nuevo el nivel hacia las cotas más altas, un hard rock estilo aerosmith, armónica incluida, con el que posiblemente tenga el mejor trabajo de guitarra de todo el disco, esta vez más estándar por decirlo de alguna manera, la letra de nuevo rara, aunque a mí me gusta, y me hace pensar cosas, un temazo impresionante, con unos sólo de Marcovich que quitan el hipo, de verdad, grandísimo.

El año del dragón podría entrar en la misma liga que el animal, una canción potente, a la que para mí, la producción no le hace meritos, suena farragosa por momentos, aunque la estructura y el tema en general está bastante bien, con un estribillo con una melodía juguetona.

El disco termina con la llorona, una versión de un tema popular mexicano, para mi prescindible, aunque tampoco mala, y no empaña lo que a todas luces es un monumento a la música rock en castellano, con raíces, bien llevadas, no manidas y comercialoides. Después de esto, el grupo se separó, Saúl siguió con jaguares, con buenos discos, y un sonido parecido, aunque para mi gusto sin alcanzar a lo hecho junto a Marcovich.

Siento que haya hecho una crítica tan larga y extensa, quizá me excedí, y seguramente eso y que el grupo no sea conocido(aquí en España), además de el hecho de que lo haya denominado como rock latino, puede que provoque que poca gente lea la crítica y les de una oportunidad.

Un disco para disfrutar y paladear sin prejuicios, una maravilla, y de mis discos favoritos en español. Espero que le deis una oportunidad, y si os parece una mierda, pues no pasa nada, saludos a todos, y perdón por aburriros, jejeje.

"Afuera"