Coleccionando vinilos - 114 - SANTA RITA - "High on the seas" (2013)




Me apetecía llegar a este disco, por tres motivos.

El primero, que me gusta descubrir grupos por sorpresa y en una de esas rebajas para quitarse discos físicos de encima que hacen las discográficas de vez en cuando, me hice con unos cuantos discos del sello Aloud Music y estaba este y no sabía que podía encontrarme al poner la aguja.

El segundo, porque me encanta el grunge y la suciedad, y este disco me recuerda a esos años, a Nirvana, Pj Harvey, L7, Hole, Soundgarden.....

Y el tercero, para ver lo injusto y efímero que es este mundo de la música. 4 chicas con pose rockera y esa actitud que me gusta de aparecer en casi todas las fotos de promo con el rostro tapado. 4 chicas que hacen grunge heredero de los 90 y que engatusó a todos los medios y se oían frases como "Gran debut", "prometedor futuro", "carrera apasionante la que les espera", bla, bla, bla.....

Pues desconozco el destino de las cuatro chicas, igual ahora están en un grupo de renombre, pero que sepáis que este disco de debut, este pedazo primer disco de buen rock de Santa Rita, fue también el último disco de Santa Rita.

Así es la vida. Eso si, poned la aguja y a disfrutar. Good Rock


Desde su sello Aloud Music se deshacían en elogios hacia estas riottt girls

El resultado son 9 temas que arañan el grunge y abrazan el rock como si de un milagro se tratara. Las melodías muerden tu consciencia dejando herida y los ritmos invocan a viejos fantasmas que parecían enterrados en el Seattle de los 90. Hay en “High on the seas” parte de la inocencia con que Nirvana cambiaban el mundo con “Bleach“, aunque una simple escucha del disco no hará más que destacar una personalidad a prueba de bombas. Santa Rita ya suenan a Santa Rita, y estamos hablando de su primer disco.
High on the seas” es un imparable tratado de rock urgente, dinámico y afilado que propone, en 9 etapas, un viaje por los mares del mundo con paradas en rincones de belleza incontestable y que provocan sensaciones irrepetibles
Una de las grandes sorpresas de 2013. “High on the seas” es el primer disco de Santa Rita, banda de Barcelona formada por Cecilia Diaz (voz), Natalia Brovedanni (guitarra, coros), Martha Wood (bajo, coros) y Laura Oliveras (batería, coros).
Durante los últimos años hemos podido ver el nombre de Santa Rita en las programaciones de las salas más importantes de Barcelona. Con un sonido agresivo y un directo de alto voltaje, les bastaron 5 canciones editadas en su primer EP homónimo para agitar cuerpos y convertir su primer disco en uno de los ejercicios musicales más esperados del año.
Si por algo destacan Santa Rita es por su constancia, tesón y trabajo fuera de los focos. Fue en el pequeño y mítico local de (lo:muêso) dónde grabaron su primer EP, y ha sido en una pequeña pero acogedora habitación de una casa en Andorra dónde han dado forma a este “High on the seas“, en sesiones de ensayo demoledoras que se alargaban hasta las 14 o 15h diarias. Han tocado la extenuación con la punta de los dedos, pero la búsqueda ha merecido la pena.
El resultado son 9 temas que arañan el grunge y abrazan el rock como si de un milagro se tratara. Las melodías muerden tu consciencia dejando herida y los ritmos invocan a viejos fantasmas que parecían enterrados en el Seattle de los 90. Hay en “High on the seas” parte de la inocencia con que Nirvana cambiaban el mundo con “Bleach“, aunque una simple escucha del disco no hará más que destacar una personalidad a prueba de bombas. Santa Rita ya suenan a Santa Rita, y estamos hablando de su primer disco.
High on the seas” es un imparable tratado de rock urgente, dinámico y afilado que propone, en 9 etapas, un viaje por los mares del mundo con paradas en rincones de belleza incontestable y que provocan sensaciones irrepetibles. Para su directo, Santa Rita exprimen aún más la tensión y el volumen de sus amplificadores. Sus conciertos en el Primavera Sound (Escenario Smint), o junto a Juliette Lewis, les dieron el certificado de garantía.

Otra reseña desde el enano rabioso

Crudo y directo, así se presenta este High On The Seas, LP de debut de Santa Rita, una de las nuevas apuestas de este año del sello Aloud Music, compartiendo con éste el gusto por las guitarras afiladas del que suelen hacer gala sus bandas.
Con este primer LP el cuarteto femenino da un salto cualitativo con respecto a su EP de presentación. Atrás han dejado el sonido amateur del EP por una estupenda producción en los estudios Ultramarino a cargo de Santi García, quien ha barrido la anterior querencia por un sonido sucio más cercano al punk para abrazar las bondades del rock con ciertos ramalazos grunge, sonidos limpios y potentes.
Para los que tenemos ya una cierta edad nos es fácil encontrar a lo largo del minutaje de High On The Seasguiños a otras bandas femeninas de los 90 como Hole o Elastica, aunque quizá la más certera sería la de emparentarlas con el fabuloso trío que era Sleater-Kinney, tanto por la crudeza de sus guitarras como por la base rítmica, en pos de crear en cada tema una obra campacta sin necesidad de recurrir a estribillos demasiado pegadizos. Buen ejemplo de ello son “Pacífico”, “Fidji” o “Cap de Creus”. Pero puede que este punto a favor al comienzo se pueda volver en su contra, ya que para nada se trata de un trabajo que a las primeras de cambio te enganche, siendo necesarias varias escuchar para poder ir degustando con tranquilidad todo lo que bajo el mar de canciones compuestas han ido dejando.
En el destacado de High On The Seas es imposible dejarse en el tintero la montaña rusa que supone “Fisterre”, cierre del álbum, con sus cambios, desde el punteo inicial que sirve para ir creando el ritmo hasta la furiosa ruptura, o la pegadiza “Adriático”, quizá la más “radiable”, y la apertura con “Báltico”, mezcla de sensualidad y fiereza en poco más de tres minutos.
La partida ya ha comenzado y por ahora la jugada les ha salido muy bien a Santa Rita. Esperamos próximas jugadas, pero visto lo visto hay material para salir airosas del quite.

"Baltico"


Y otra más, y podría seguir pero ya paro, con los elogios hacía este disco debut. Esta vez desde Cosmic Tentacles.

¿Cuatro mujeres reivindicando el espíritu sucio y primario de los 90? Bien, partíamos de una premisa interesante, mucho más cuando la edición del debut de esta banda barcelonesa venía de la mano de Aloud, un sello al que le tenemos un cariño y respeto inmenso por estos lares. Así que no me lo pensé dos veces cuando High On The Seas cayó en mis manos y presta me dispuse a zambullirme en las aguas de Santa Rita, formación que ya cuenta en su haber con unos cuantos directos a sus espaldas y una participación en el pasado Primavera Sound. Si ya al abrir el libreto descubro que la producción ha corrido a cargo de Santi García en sus estudios Ultramarinos Costa Brava, comprenderéis (alguno lo haréis) por qué la curiosidad se transformó en expectación…
Seré sincera, lo primero que ocurrió cuando las notas de la inicial Báltico se introdujeron en mi cerebro fue una amplia y plena sonrisa de satisfacción. Placer al recordar mi adolescencia, rememorando los ecos de una forma de hacer rock que ya creía olvidada. Años en los que el primarismo se lanzaba a la aventura cargado de talento y distorsión y las melodías eran traviesos ejercicios de seducción, más allá de los estériles ganchos de radio fórmula que derriten nuestros oídos hoy día. High On The Seas nos recuerda que no estamos muy lejos de la famosa Generación X, ahogadas nuestras esperanzas en un futuro que nos ha sido robado y con una tenaza en nuestros estómagos mezcla de desencanto, rabia y melancolía, sentimientos que a lo largo del álbum se entrelazan en una hipnótica cópula.
Muchos son los guiños que Santa Rita lanzan al grunge, pero no por la vía clasicista de Soundgarden y Pearl Jam sino por la más subterránea que representaban Nirvana, Mudhoney o incluso Tad, esa que bebía del noise y el post-hardcore embrionario como fuentes originarias de su propuesta y que en vez de posters de Led Zeppelin o Black Sabbath empapelaba sus paredes con ajados flyers de Sonic Youth, Flipper o Hüsker Dü. Sentimientos a flor de piel que se fusionan con la urgencia y el desdén por las florituras de quien no tiene tiempo ni ganas de vestir sus penas de etiqueta son la base de la propuesta del cuarteto, que tampoco duda en retraer las uñas y repartir caricias preñadas de amargura cuando así le conviene, convirtiendo cortes como Mar Muerto o Cap De Creus en verdaderas joyas de rock atemporal. La voz de Cecilia Díaz Betz exhibe una maravillosa dualidad entre nervio rockero y delicadeza casi pop, la guitarra de Natalia Bovedanniparece proceder de algún punto medio entre sus entrañas y la inmensidad del océano, y la sección rítmica compuesta por Laura Oliveras y Martha Woods es todo un homenaje a las grandes duplas de antaño, esas que eran todo pasión y versatilidad hasta que llegó la fría perfección de la modernidad. Podría continuar alabando las virtudes de temas como la fantástica Cap De Creus y su coitus interruptus final, las oscuras y ensoñadoras aguas de Pacífico o el vulcanismo submarino de Fisterra, pero me limitaré a retirarme satisfecha con lo dicho y recomendar fervientemente High On The Seas a todo aquel que quiera disfrutar de un modo de interpretar la música que afortunadamente nunca morirá mientras existan bandas como Santa Rita.

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