midiscodemisemana - BARON ROJO "Volumen Brutal" (1982) & " Barón al rojo vivo" (1984)



Ante la pregunta ¿Quien ha sido el grupo en español que más repercusión ha tenido en el extranjero?



un 99% respondería HEROES DEL SILENCIO.


y un 1% tendría buena memoría y diría BARON ROJO.


Corrían los primeros años 80, y había tres estilos de música principales: El pop electrónico, el pop gracioso y el rock de mallas y laca.


No fueron grandes tiempos para la buena música y las máquinitas hicieron mucho daño, pero ahi estaban unos cuantos heavys para mantener el espíritu del rock.


En España hay estaban OBUS, LEIZE, PANZER.... y sobre todo....BARON ROJO.


Pudieron ser uno de los grandes a nivel mundial, lo aseguro, del 80 al 85 no tenían rival, y si lo tenían estos eran Iron Maiden, Deep Purple, ..... actuando incluso en el Festival de Reading.


Sus dos obras maestras fueron "Volumen Brutal" y su directo "Barón al rojo vivo".


Pero no pudo ser, y todo por la mala gestión del grupo desde fuera.


Todo se puso en su contra, y su MANAGER y su DISCOGRAFÍA, se equivocaron en todas sus decisiones.


Así, se les ofreció toda la gira americana de teloneros con AC/DC pero tenían que pagar 7 millones de pesetas y el manager y la compañia se negaron. Era obvio que iban a conseguir ganancias muy superiores a ese precio por recorrer todo EEUU, con todo el mercado de lengua hispana que había.


También se les ofreció un LIVE AT BUDOKAN, la mítica sala de Japón, y que solo los grandes grupos podían contar en su discografía con un Live at Budokan, pero también les pedían 2 millones y su sello Chapa Discos también se negó.


Les cortaron las alas y los contratos exclavos que firmaron sin leer la letra pequeña y los malos rollos internos hicieron el resto.


Hoy su sonido ha envejecido mal, ese heavy metal clásico se ha quedado algo anticuado, pero de vez en cuando recuperar sus discos y escucharlos es un gran ejercicio de nostalgia.




Algún nostálgico se ha decidido ha hacer una película.
BARON ROJO, LA PELICULA
TRAILER

http://www.youtube.com/watch?v=DrO44ng-A5I




OPINION DEL DISCO EXTRAIDA DEL BLOG http://los-clasicos-del-rock.blogspot.com/



Sin duda alguna el mejor disco de rock duro-heavy metal de la historia dentro de nuestro país. Editado en más de medio mundo, nos representa a nivel mundial. Este disco es la Biblia del rock. Con un apabullante éxito .Fue tan grande, que tuvieron que hacer muchos conciertos, cientos en toda España y cruzar las fronteras para hacer festivales, giras y conciertos en más de medio mundo.Esta obra maestra es todo un vendaval de fuerza, energía y sentimiento.La caña que desprende cada tema es atronadora, cada canción es todo un himno en la historia del rock. El disco contiene diez temas y son 10 hits y la letras llenas de denuncia social de todo tipo, que no sentó nada bien, al gobierno de la época, era como si les hubiera salido un grano en el culo. Además las letras son tan reales, que estaban diseñadas para identificarse con todas las personas. Letras que criticaban el momento vivido en esos tiempos.Tuvo tanto éxito el disco, que se tuvo que grabar otra vez en ingles .pues la demanda del mercado era muy grande. Y en Inglaterra se hicieron muy queridos, gracias a sus salvajes conciertos.Muchos músicos, estrellas del heavy, quisieron, tocar con ellos como Michel Senker, Bruce Dickison o el mismísimo Ian Gillan, que dejo su estudio para que se grabara esta obra de arte.Un disco antológico que nos representa a todos con mucho orgullo.Y la guinda al pastel es El barón vuela sobre Inglaterra, es una muy buena composición del grupo al completo. Instrumental que para nada está de relleno, para que tomasen nota en el resto de Europa de lo que se sabía hacer en España.La edición de este álbum les llevó de gira por Inglaterra, llegando a tocar en 1982 en el Reading Festival, compartiendo cartel con Iron Maiden y Michael Shenker







OPINION DEL DISCO EXTRAIDO DEL BLOG http://www.elportaldelmetal.com/


Si hay un periodo en la historia del rock español en que nuestras bandas pudieron mirar de igual a igual a muchos de los grupos que triunfaban en el exterior, fue durante la primera mitad de los ochenta. Músicos como José Antonio Manzano, Salvador Domínguez, Miguel Ángel Collado o Jerónimo Ramiro podían dar lecciones a cualquiera. Obús y Bella Bestia tenían una puesta en escena tan potente e imaginativa como muchas bandas de metal consagradas en el exterior, y si los ingleses tenían a Ian Anderson y a Rob Halford, nosotros podíamos presumir de contar con el gran José Carlos Molina y con Juan Gallardo, vocalista de Ángeles del Infierno, el mejor cantante heavy que ha dado este país.
Incluso cuando en la segunda mitad de esa década se produjo el boom de las bandas de metal más suave, tipo House of Lords, Bad English o FM, en España disfrutamos con la calidad instrumental y las melodías de Sangre Azul y Niágara.
Pero el grupo español de rock duro por excelencia es, y será siempre, Barón Rojo, la formación de los hermanos De Castro, José Luis Campuzano@Sherpa y Hermes Calabria, sin menospreciar la labor de los restantes músicos que han pasado por la banda en uno u otro momento de su trayectoria.
En 1984 los Barones contaban con un repertorio de canciones inmejorable, una numerosa base de fans, y el respeto de músicos y críticos heavies en toda Europa. Habían grabado tres discos de estudio fundamentales, y actuado en el festival de Reading en las Islas Británicas un par de años antes, junto a leyendas como Iron Maiden, Gary Moore, Twisted Sister o el Michael Schenker Group. De su segundo álbum, el clásico “Volumen Brutal”, incluso grabaron en Londres una versión en inglés, verdaderos logros para un grupo heavy español en aquellos tiempos, que culminaron en los llenazos que durante dos noches seguidas del mes de febrero registró el Palacio de los Deportes de Madrid, y de los que salió un histórico album doble en directo, el devastador “Barón al Rojo Vivo”.
A pesar de lo cómicos que resultaban los títulos de sus canciones en inglés, a pesar de que Salvador Domínguez los acusara en unas desafortunadas declaraciones de estar gordos, viejos y calvos, los Barones tenían clase. La suficiente como para tomar su nombre de un aviador legendario de la primera Guerra Mundial e iniciar el concierto con el sonido de las hélices de un planeador de combate. “Barón Rojo”, la canción, comienza con un arpegio de guitarra precursor del “Thunderstruck” de AC/DC. Los instrumentos van entrando y la batería comienza a acelerar, obligando a las doce cuerdas de Armando y Carlos De Castro a puntear con agilidad, hasta que el arpegio se corta y Armando se marca el primer solo memorable, justo antes de que Sherpa entone ese “mítico barón…”, y desgrane esa magnífica letra llena de épica y pasión sobre las aventuras del Barón y sus vuelos por el Viejo Continente.
La interrupción hacia la mitad del tema, sobre el minuto 3´50 es de antología, y los motivos instrumentales del comienzo se repiten, se suceden, mientras el público vocifera, consciente de que está presenciando momentos históricos, hasta fundirse las guitarras y el bajo en un éxtasis comandado por los bombos de Hermes Calabria que lleva al órgasmo en el minuto 5´10, donde es imposible permanecer quieto, donde sientes la necesidad de mover el cuello hasta el límite de tu resistencia. Esos cambios de ritmo en una misma canción, esa bajada de tensión del parón en mitad del tema resuelta con tanta pericia sólo la podían hacer maestros como Judas Priest –me viene a la cabeza “The Sentinel”-, y ellos. Momentos como el descrito propiciaban que todo un Bruce Dickinson subiera a compartir el escenario de Reading con nuestros protagonistas.
“Incomunicación”, la canción con la que un servidor descubrió el Heavy Metal, el poder de unos acordes, el gancho de un buen estribillo, la empatía que unos buenos textos pueden transmitir. Y esos alaridos de Carlos de Castro. Pese a ser un vocalista con menores recursos técnicos que Sherpa, sabía ser igual de pasional y expresivo. La labor solista de Armando de Castro en la parte final, de cátedra una vez más.
Como sus punteos en la siguiente, “Campo de Concentración”, el primero de los cuatro temas nuevos que el grupo presentó en las dos noches en el Palacio. El texto, la ambientación de la intro, sugerían esa sensación apocalíptica, en una letra pesimista, inteligente y avanzada a su época, desenmascarando a ese Gran Hermano que nos vigila, a esa “sucia red traficante de miedo, dispuesta a vender, a estafar y a mentir” (literal). Inolvidables los coros del estribillo, esas palabras de rebeldía y autoafirmación. El solo de guitarra de don Armando, de lo mejor que se había escuchado entonces en nuestro país, con una sección final que de nuevo me recuerda a Judas, cuando Glenn Tipton concluye con una línea melódica los punteos de “Electric Eye”.
La siguiente canción, “El mundo puede ser diferente”, junto a las dos que cerraban el primer vinilo, “Mensajeros de la Destrucción” y “Atacó el hombre blanco”, eran también temas nuevos que Barón estrenó para la ocasión, y sin llegar a ser flojas, sí que bajaban un poco el nivel, sobre todo las dos últimas. Desconozco el motivo de que la banda decidiese incluir temas nuevos en este directo, sobre todo teniendo en cuenta que “Larga vida al Rock&Roll”, “Volumen Brutal” y “Metalmorfosis”, los tres discos de estudio anteriores, estaban repletos de canciones buenísimas que se quedaron fuera. De hecho, en 1986 se editó otro live album del grupo, “Siempre estáis allí”, con material sobrante de este “Al rojo vivo”.
Pero por suerte, antes de concluir esa primera parte del doble album, teníamos otros dos clásicos, “Las Flores del Mal”, con letra antibelicista de Carlos de Castro esta vez; y una de las mejores canciones del grupo, lo que equivale a hablar de uno de los mejores momentos del heavy metal grabado en España: La fabulosa “Concierto para Ellos”, el homenaje de los Barones a sus ídolos fallecidos, una serie de mitos del rock de los sesenta y setenta recitados del tirón en el estribillo de este tema, otra maravilla con letras mágicas que incluyen referencias a Whitesnake y a Rainbow, y que culminan en el puente, ese inmortal pre-estribillo de José Luis Campuzano: “En cada concierto de Rock&Roll, las campanas doblan por Bon Scott”. Y el estribillo, venga, vamos a enumerarlos a todos, que aunque suene a coña tardé más de veinte años en descifrarlo al completo: “Por Janis, Lennon, Allman, Hendrix, Bolan, Bonham, Bryan y Moon”. Que a Lennon y a Hendrix los conoce todo el mundo, pero no creáis que en 1984 se tenían muchas referencias en España del músico inglés de glam Marc Bolan, o de Duane Allman, mítico guitarrista de los Allman Brothers. Y de los Stones conocías a Jagger y a Richards, no tanto al enigmático Bryan Jones, fallecido hacía entonces quince años en circunstancias extrañas.
La inclusión de esas referencias en el texto de la canción evidencia la amplitud de miras e inquietudes musicales por parte de los componentes de Barón Rojo, ARTISTAS con mayúsculas interesados en empaparse del inmenso acervo cultural del Rock&Roll. Aparte de la letra, la música de este tema es extraordinaria, con otro punteo inigualable de Armando.
“Tierra de Vándalos”, composición con momentos casi trashers pese a que data de 1983, y el trash no se había inventado todavía, abría el segundo Lp. Un largo solo de guitarra de Armando de Castro enlazaba después con una breve alusión al “Whole Lotta Love” de Zeppelin, y al momento de mayor virtuosismo instrumental de toda la grabación: las galopadas por el mástil en la adaptación de las “Czardas”, una pieza popular ¡húngara! del compositor Vittorio Monti. Los barones no dejaban de sorprendernos.
Bueno, y la recta final, el solo de batería de Hermes Calabria, la instrumental “Buenos Aires”, con lucimiento de los dos hermanos De Castro al unísono, y el sólo de bajo de Sherpa en la catártica “Con Botas Sucias”, dedicada a la Compañía de discos CBS –de ahí el título-, con la que habían tenido los típicos malos rollos contractuales.
Y no. No me olvido, no podría olvidarme ni de “Los Rockeros van al Infierno”, ni de “Resistiré”, dos composiciones magistrales de Sherpa y de su esposa Carolina Cortés la primera, y de dicha pareja junto a los hermanos la segunda, dos obras de arte que elevan el repertorio de este disco en vivo y lo acercan a los cinco cuernos, a los que si no llega es por la presencia de esos temas inéditos que he mencionado en párrafos anteriores que la banda decidió incluir y que bajaron un poco el listón. Ni recuerdo la de veces que escuché estas dos canciones en aquellos tiempos siendo un adolescente, la fuerza y confianza para actuar en la vida que recibí de ellas, o la envidia que sentía al escuchar al público responder a los gritos del showman Sherpa en “Los Rockeros…”, en otro de los muchos momentos apoteósicos. La frase, cuando Armando finaliza el solo, ese “que risa me da esa falsa humanidad de los que se dicen buenos”, sonaba arrolladora y vigente entonces, lo suena ahora y lo seguirá sonando dentro de mil años.
“Barón al Rojo Vivo”, el tratado de cómo tocar rock en directo en España. Espero que lo disfrutéis.


en un especial de TVE en los 80 sobre el Heavy Metal Español (insólito)
ver los tios bailando rodeando al presentador no tiene precio.



"los rockeros van al infierno"
http://www.youtube.com/watch?v=DFE3S3_nLFI


"resistiré"
http://www.youtube.com/watch?v=mScP5-UBCwg

Comentarios

Entradas populares de este blog

micanciondemisemana - ROSENDO - FLOJOS DE PANTALON

miportadademisemana - PINK FLOYD "The dark side of the moon" 1973

Capítulo 3. FRASES ESCONDIDAS EN CANCIONES. Hoy... IVÁN FERREIRO