miportadademisemana - GRAVEYARD - HISINGEN BLUES (2011)



Segundo disco de estos suecos afincados en el sello metalero y cobijo de grupos más extremos Nuclear Bast. Pero no se confundan, lo que aqui suena tras dar al PLAY, es una regresión al rock lisérgico de los 70, sonidos que nos recuerdan a mis adorados Led Zeppelin, a Black Sabbath, a Deep Purple, a Jimi Hendrix...

No me gusta desvelar mis cartas de cara a la tradicional lista de lo mejor del año, pero si el año pasado en el apartado internacional ganó Black Mountain con unos sonidos similares, este año se va a quedar muy cerca Hisingen Blues de GRAVEYARD.

Y que me dicen de la portada??? No es una magnífica foto, ni un trabajo artístico brutal. Pero me encanta. Esos tonos verdes, y sobre todo esa separación entre lo que está por encima de la superficie y lo que está por debajo del agua. Dos mundos tan cercanos y tan distintos.
Ellos navegan por encima del agua solo apoyados en un tronco de madera y en una aparente tranquilidad y felicidad, pero solo aparente, porque debajo del agua se esconden múltiples peligros que ante el menor descuido te pueden provocar un gran problema.

No he encontrado el autor de la portada, pero quería hoy mencionar a estos suecos que han conseguido un disco redondo, de lo mejor del 2011 y que viene acompañado de una maravillosa portada.





VIDEO:


http://www.youtube.com/watch?v=OnGBa8dVm6k&feature=results_video&playnext=1&list=PL228B15A458390E35



ME VAN A DISCULPAR, NO SOY MUCHO DE "APROPIARME" DE PARRAFOS AJENOS, PERO BUSCANDO INFORMACIÓN PARA LA ENTRADA DE HOY, HE ENCONTRADO UNA ENTRADA EN UN BLOG HABLANDO DE ESTE DISCO QUE ME HA EMOCIONADO Y ME HA PARECIDO MUY PROFESIONAL Y DEMUESTRA QUE SE HA ESCUCHADO EL DISCO CON DEDICACIÓN ABSOLUTA.

este es el blog:
http://ecosderlyeh-cthulhu.blogspot.com/

esta es su frase de presentación:
Sonidos procedentes de otros planos. Gritos reverberando en frecuencias superpuestas. Ritmos en honor a estrellas moribundas. Mantras enloquecidos desde abismos insondables. Carcajadas cayendo a plomo como lluvia sobre la tapa de un podrido ataúd. Melodías para una muerte frenética. Música para el fin de los tiempos.


Y esta su aportación hablando de este genial disco:

Hisingen Blues es simplemente apoteósico. Es difícil pensar en este trabajo como en un hijo de 2011 y no de la lisérgica década de los 70, siendo uno de los mejores piropos que se le puede lanzar a un combo como el sueco. El sonido es tan orgánico y fluido que rompe con la etiqueta de retro o revival para instalarse directamente en la liga de los grandes clásicos. Despojados de artificios y sonoridades modernas, Graveyard nos retrotraen a una época en la que para comerse el mundo tan sólo hacía falta talento (mucho talento) y pasión desbordada por la música, factores gracias a los cuales la década brilló con una luz que aún a día de hoy nos sigue cegando. Y si no que se lo digan a Kyuss, Monster Magnet, Pearl Jam, Clutch o casi cualquier gran banda de rock de la que podamos disfrutar hoy día. Aupándose sobre todos los aciertos de su predecesor, Hisingen Blues se impulsa muy por encima de aquel no por ningún viraje estilistico concreto, sino simplemente porque el cuarteto se ha cascado un álbum monstruoso, que perfectamente podría alcanzar la categoría de referencial si no fuera porque cuatro décadas después y con los clásicos enfrente eso está muy difícil. Pero a quién cojones le importa cuando desde el comienzo los suecos te electrifican de arriba a abajo con la energía pura y sin adulterar de Ain't Fit To Live Here, con un Joakim Nillson saliéndose por los cuatro costados merced a una interpretación vocal tan clásica como memorable, un nivel de excelencia del que no se apea en ningún momento. Axel Sjöberg está inmenso aporreando los parches, y como si de un John Bonham moderno se tratase alcanza momentos de auténtico vulcanismo percutivo. Tanto Nillson como Jonatan Larocca Ramm realizan un trabajo espectacular a las guitarras, especialmente el segundo merced a unos solos de guitarra herederos del mejor visceralismo incendiario del gran Jimmy Hendrix. No podemos olvidarnos de Rikard Edlund, que con su talento nos recuerda que antes de los sonidos engordados hasta la saturación, había gente como John Paul Jones o Andy Fraser comiéndose el mundo a las cuatro cuerdas. Sin embargo todo esto quedaría reducido a fogonazos dispersos si no fuera porque en el caso que nos ocupa prenden sobre 9 temas espectaculares, dando forma a un álbum que es un verdadero incendio rockero. Cortes como el single Hisingen Blues y su lírica luciferina o Ungrateful Are The Dead y ese genial teclado que lo introduce están entre lo mejor que servidor haya escuchado en mucho tiempo dentro del género, recordándonos que el legado de Cream, Deep Purple o Steppenwolf sigue muy vivo. Pero la joya del álbum es sin lugar a dudas Uncomfortably Numb. Perfecta, preciosa, digna de ser colocada junto a cualquiera de los temas legendarios de la edad de oro del rock, todos sus elementos se conjuran para ponerte los pelos de punta. Los ecos de Black Sabbath se encuentran en Hisingen Blues más atenuados que en el debut de la banda, eligiendo fuego en vez de piedra, blues en vez de proto-heavy, dando como resultado un trabajo de alma abrasadora

Comentarios

Entradas populares de este blog

micanciondemisemana - ROSENDO - FLOJOS DE PANTALON

miportadademisemana - PINK FLOYD "The dark side of the moon" 1973

Capítulo 3. FRASES ESCONDIDAS EN CANCIONES. Hoy... IVÁN FERREIRO