LOS MEJORES DE 2016 según.....HIPERSONICA
Hoy repasamos lo que eligió como lo mejor del año una de mis webs de referencia, Hipersónica. No duden en echarla un vistazo, se engancharán.
Os resumimos los 5 mejores discos nacionales y los 5 mejores internacionales, pero vayan a su web y verán esta lista ampliada a los 50 discos internacionales y 20 discos nacionales.
Buen criterio como el de este gente, dificil encontrar.
LOS MEJORES DISCOS NACIONALES SEGÚN HIPERSONICA.
Se acaba 2016. Un año para olvidar en muchos sentidos relacionados con la música, y, con todo, otro nuevo año de discazos. Como en esta ocasión os soltamos toda la lista de un tirón, los 50 de golpe, no nos eternizaremos en la intro, que bastante curro os ponemos por delante. Con todos ustedes, queridos sordos, los 50 mejores discos internacionales según Hipersónica. Debajo del todo podéis encontrar nuestra spotilista con los temas. De aquellos discos de los que no hay canción es porque al ser inventados, no están en Spotify.
5. Kiran Leonard — Grapefruit
Más en Hipersónica | Kiran Leonard — Grapefruit
4. Car Seat Headrest — Teens of Denial
Moraleja: Qué putos amos los putos amos y qué sordos los sordos.
Más en Hipersónica | Car Seat Headrest — Teens of Denial
3. Jeff Rosenstock — Worry
2. King Gizzard and the Lizard Wizard — Nonagon Infinity
Ya lo dijo Isra: cuando el camello se plante en la puerta, estos son los tipos a los que hay que llamar.
Más en Hipersónica | King Gizzard and the Lizard Wizard — Nonagon Infinity
1. Angel Olsen — My Woman
LOS MEJORES DISCOS NACIONALES SEGÚN HIPERSONICA.
5. Los Ganglios — Segunda escucha
Son extremeños, tienen derecho.
4. Jardín de la Croix — Circadia
Puede llegar a ser complicado conectar y emocionarse con un grupo puramente instrumental tan volcado en los sonidos del post-rock, math rock y hasta del rock progresivo. ¿Tarea imposible? No en el caso concreto de Jardín de la Croix, que logran en su cuarto álbum mostrar una capacidad asombrosa para contar historias llenas de matices y de transmitir emociones a flor de piel. Circadia supone otra muestra más de su enorme talento ante el que esta casa no puede hacer otra que rendirse sin condiciones.
Más en Hipersónica | Jardín de la Croix — Circadia
3. beGun — Amma
La electrónica patria ha sido muy prolífica este año. Que el número tres del top anual sea para uno de esos álbumes lo corrobora. Amma, el esperado debut en largo de beGun, es un notable paseo por la música africana, totalmente en simbiosis con sus beats y sus excelentes ritmos y ambientaciones, jalonadas por instrumentación de dicho continente y por el refinado gusto del propio beGun. Mediante el escapismo y los postulados oníricos que funcionan como un hilo conector que no te suelta durante todo el álbum, Amma nos introduce también en una realidad bastante jodida de las migrantes africanas — una de ellas es la que da nombre al disco — que llegan a Barcelona en busca de otra realidad para encontrarse con situaciones bien distintas. Una buena forma de acordarse de ellas este tribal trabajo, que de paso, recuerda que la electrónica también es reivindicativa.
Más en Hipersónica | beGun — Amma
2. Espanto — Fruta y Verdura
Espanto ya era un grupo imprescindible, pero Fruta y Verdura les ha ayudado a convertirse en uno absolutamente impredecible en su brillantez. Llegaban a su nuevo disco con una colección de canciones antiguas que han pasado demasiado tiempo siendo pensadas, y ésa es una situación que casi siempre acaba en fiasco. Pero de ‘Morirás’ a ‘Mi Tigre y yo’ hay una tempestad de talento desbordando cada uno de sus límites. No hablamos de un riachuelo cualquiera: hablamos de la misma sensación que tiene ver a un río como el Ebro (enorme, caudaloso, casi siempre autocontenido) salirse de sus márgenes. Desde lejos, a vista aérea, es alucinante. Desde cerca da miedo que te lleve con él (a ti o a tus cosas) y a la vez es un “ya te lo decía yo”. Ambicioso y arriesgado en lo musical, y punzante en lo lírico, los Espanto de 2017 son responsables de los antihits más grandes de este año. Mirados fríamente, ninguno debería tener oportunidad alguna, pero tu cabeza siempre se queda a tararearlos, a cantarlos y a tratar de encajarlos en los huecos de tu vida. Buenos y salvajes.
1. Triángulo de Amor Bizarro — Salve Discordia
No es cuestión de pasarnos de transparencia, pero podríamos decir que la contundencia con la que TAB se ha impuesto en el Top nacional dentro de este año no tiene un precedente claro en la redacción hipersónica. Tampoco os sorprenderá, si habéis escuchado esa bomba nuclear llamada Salve Discordia. Poco empujón necesitaban para confirmarse como la banda más interesante surgida aquí en los últimos años, pero desde luego Salve Discordia ha conseguido cuadrar el círculo. Mantener la contundencia habitual, y refinar el asalto definitivo al pop que tantas veces habían intentado ya, pero que jamás habían conseguido con semejante perfección. Da igual qué respuesta a preguntas milenarias busquéis, TAB te la da en este disco, mientras va volando cada una de las circunvoluciones de tu cerebro, haciéndolo añicos entre distorsiones y caos, en ‘Gallo negro se levanta’, entre estribillos pegadizos como chapapote en ‘Barca quemada’, melodías maravillosas, ‘Baila sumeria’ o frases para recordar siempre, ‘Qué hizo por ella cuando la encontró’. Un disco absoluto. Uno de esos que define para siempre tu obra y que pone el listón inalcanzable para el siguiente. ¿O no?
Comentarios
Publicar un comentario