Coleccionando vinilos - 229 - QUILAPAYUN "El pueblo unido jamás será vencido" (1975)

 
Adoro a Nacho Vegas y aunque me gustan más otras temáticas en sus canciones, tambien le encanta ir colando canciones políticas/sociales en sus discos.
Estoy seguro que a parte de Violeta Parra (donde la homenajeó en el título "Violética" de su penúltimo disco hasta la fecha) también conocerá a este combo chileno, que con sus canciones protesta ha creado himnos que han sido adoptados por el pueblo y se han utilizado en multiples manifestaciones y luchas del pueblo contra el poderoso.

Ya en una anterior temporada hablamos de un disco suyo. En esta ocasión, hablamos de un disco 100% político y que contiene el gran himno "El pueblo unido jamás será vencido", que casi ha ocultado el resto de canciones de este vinilo.

Musicalmente y temáticamente la unen mucho con la canción protesta antifranquista que hubo en España y que muchos tuvieron que exiliarse o lograr salvar la censura "tapando" el verdadero mensaje de la canción.

A continuación, interesantes reportajes sobre este disco y sobre todo, sobre la canción histórica que contiene.



Lista de canciones[editar]

N.ºTítuloLetrasMúsicaDuración
1.«Compañero presidente» (*)Eduardo CarrascoEduardo Carrasco
2.«Elegía al Che Guevara» (3a grabación; la 1a es de Quilapayún 3, y la 2a de un álbum con Isabel Parra)instrumentalEduardo Carrasco
3.«Canción de la esperanza»instrumentalEduardo Carrasco
4.«El rojo gota a gota irá creciendo»Eduardo CarrascoEduardo Carrasco & Horacio Salinas
5.«Chacarilla»popularpopular & Illapu (arreglos)
6.«El alma llena de banderas»Víctor JaraVíctor Jara
7.«Titicaca»instrumentalpopular
8.«La represión» (2a grabación; la 1a es de La fragua)Sergio OrtegaSergio Ortega
9.«La represión»Julio RojasJaime Soto León
10.«El pueblo unido jamás será vencido»Sergio Ortega & QuilapayúnSergio Ortega

Créditos

Quilapayún


Desde wikipedia tambien se extienden con la canción y dejan un poco en el olvido el disco que la contiene:


El pueblo unido jamás será vencido» es una canción protesta chilena, cuya música fue compuesta por Sergio Ortega Alvarado y el texto escrito en conjunto con la banda Quilapayún.1​ Conocida en el mundo entero, es una de las más famosas canciones de protesta de la historia, y junto con el tema «Venceremos», también de Ortega, una de las más conocidas de la Nueva Canción Chilena.2​ El tema tiene un ritmo de marcha, destacando su estribillo que es un grito o consigna sólo con percusión, lo que facilita su adaptación a cualquier idioma.2

Historia[editar]

Primeros años[editar]

«De pie, cantar, que vamos a triunfar.
Avanzan ya banderas de unidad,
y tú vendrás marchando junto a mí
y así verás tu canto y tu bandera florecer.
La luz de un rojo amanecer
anuncia ya la vida que vendrá.»

Sergio Ortega Alvarado, extracto de
«El pueblo unido jamás será vencido»3

El título de la canción estaría inspirado en la frase del líder político colombiano Jorge Eliécer Gaitán pronunciadas en un discurso en la década de 1940, siendo popularizada por manifestantes de la Unidad Popular durante el gobierno socialista del presidente chileno Salvador Allende a comienzos de la década de 1970.4​ Según el propio Sergio Ortega Alvarado, éste compuso la canción inspirándose inicialmente en un joven que gritó la conocida frase mientras él se dirigía caminando a su casa, en Santiago de Chile, en junio de 1973.5

La canción fue grabada por primera vez en Chile en 1973 durante un masivo concierto de Quilapayún en la Alameda de Santiago,5​ sólo tres meses antes del Golpe de Estado de Augusto Pinochet que derrocó a Allende y dio inicio al periodo de dictadura militar. Poco antes de dicho concierto, Salvador Allende había nombrado a Sergio Ortega Alvarado como Embajador Cultural del gobierno de la Unidad Popular, cargo que compartió por un breve tiempo con Víctor Jara, quien fue asesinado días después del Golpe Militar.2

A partir de entonces y durante los años sucesivos, la canción apareció en numerosos álbumes de distintas bandas y cantautores, pero principalmente de Quilapayún e Inti-Illimani, quienes tuvieron que vivir en el exilio durante todo el periodo de dictadura, siendo acogidos en Francia e Italia, respectivamente, países donde continuaron sus prolíficas carreras musicales hasta su retorno a Chile, acabada la dictadura más de quince años más tarde.67

El primer lanzamiento oficial en que apareció la canción fue durante el mismo año 1973, en el álbum en directo de varios intérpretes Primer festival internacional de la canción popular publicado por el sello DICAP, en el que participaron, además de Quilapayún cerrando el disco con «El pueblo unido...» y «Las ollitas», otros reconocidos exponentes tales como Inti-Illimani, César IsellaIsabel ParraTito Fernández y Alfredo Zitarrosa.8

La Dictadura Militar[editar]


También en 1974 aparecen las primeras versiones de la canción en estudio, siendo lanzados por sellos europeos el álbum de Quilapayún titulado justamente El pueblo unido jamás será vencido13​ —el primero en el exilio de la banda, y que al año siguiente fue lanzado por el sello chileno DICAP14​ y el de Inti-Illimani, titulado La Nueva Canción Chilena (Inti-Illimani 2), su segundo álbum en el exilio.15​En 1974, con Quilapayún e Inti-Illimani ya en el exilio, la canción aparece en varios álbumes y es interpretada en varios conciertos, siendo incorporada normalmente al final. El disco Yhtenäistä kansaa ei voi koskaan voittaa fue el primero en directo de Quilapayún, que inmortaliza un concierto realizado en Finlandia los días 31 de agosto y 2 de septiembre de 1973, sólo unos pocos días antes del Golpe Militar en su país. En dicha ocasión, la canción fue interpretada con la colaboración de la agrupación Agit-Prop.910​ El mismo año aparece también en el álbum en vivo de varios intérpretes Internationales Konzert: Solidarität mit Chile, grabación del concierto realizado el 19 de mayo de 1974 en HannoverAlemania Occidental, donde el tema fue interpretado por Inti-Illimani.11​ Días después, el 31 de mayo, se realizó el concierto solidario «Für Victor Jara» —«Para Víctor Jara»— en la ciudad de Essen, también en Alemania Occidental, en el que participaron los chilenos exiliados Isabel Parra, Patricio Castillo, Quilapayún e Inti-Illimani, acompañados por músicos alemanes. El concierto fue lanzado el mismo año en el álbum Konzert für Chile, finalizando con «El pueblo unido...» interpretado por Quilapayún e Inti-Illimani, seguido por el tema «Venceremos» interpretado por todos los músicos participantes.12

En 1977 apareció el álbum recopilatorio de Quilapayún La marche et le drapeau, lanzado en Francia y que cierra con los temas «El pueblo unido...» y «Las ollitas», grabadas en vivo de un concierto de Chile en 1973.1617​ Al año siguiente aparece A concert for Chile (In memory of Victor Jara), grabación de un concierto tributo a Víctor Jara en el Royal Albert Hall de Londres el 30 de septiembre de 1975, en que cerraron con «El pueblo unido...» interpretada por todos los artistas participantes: Quilapayún, Inti-Illimani, Isabel Parra, Patricio Castillo y Sebastian Graham.18​ En 1980 el tema cerró una gira por Italia de Inti-Illimani que se lanzó en el álbum en vivo En directo,19​ mientras que en 1983 finalizó el álbum Quilapayún en Argentina de un concierto realizado por Quilapayún en dicho país en noviembre de ese año.20

Transición a la democracia[editar]


Durante la década de 1990 y con la llegada de la democracia al país, los chilenos dejaron de interpretar tan frecuentemente este tema en sus conciertos. A pesar de ello, en 1998 aparece el álbum recopilatorio de Quilapayún Antología 1968-1992 incluyendo la versión en estudio presente en su álbum homónimo,22​ y al año siguiente Inti-Illimani la incluye en el álbum en directo publicado en Alemania Konzert für Víctor Jara, un tributo al cantautor chileno en que también participaron Óscar Andrade y la cantante griega María Farantoúri, entre otros.23​ Durante la década de 2000, la canción aparece en los álbumes en vivo de Inti-Illimani Antología en vivo (2001) y Viva Italia (2003) y en los de Inti-Illimani Histórico —facción de la banda original— Música en la Memoria - Juntos en Chile (2006)24​ y Antología en vivo (2006).25​ Por su parte, Quilapayún la incluye en su álbum recopilatorio 35 años (2002),26​ en el disco en vivo A Palau (2003), grabado en el Palacio de la Música Catalana en Barcelona,27​ y en los discos colectivos Canto por el cambio (2004), en el que participaron reconocidos artistas hispanoamericanos,28​ y en el obtenido de la edición de 2003 del festival Todas las voces todas.29​Ya en el término de la dictadura y en medio del periodo de Transición a la democracia, los integrantes de Quilapayún retornaron a su país, realizando un concierto en Chile en enero de 1989, el cual quedó plasmado en el disco Quilapayún ¡en Chile! que una vez más finaliza con esta canción.21

Versiones[editar]


En 1974, después de la llamada Revolución de los Claveles en Portugal, el músico Pedro Osório compuso la canción «Portugal Ressuscitado» (en español, «Portugal resucitado»), cuya letra fue escrita por el poeta Ary dos Santos.30​ Esta canción posee un verso que dice «Agora, o povo unido nunca mais será vencido», y aunque mantiene la estructura y el espíritu lírico de la versión original, las similitudes son muy pequeñas respecto a la melodía.Por su temática revolucionaria y su facilidad para ser interpretada en distintos idiomas, esta canción posee numerosas versiones, correspondientes a distintas épocas y estilos musicales.2

En 1975, el pianista estadounidense Frederic Rzewski compuso The People United Will Never Be Defeated!, la que se ha convertido en una de sus composiciones más reconocidas, correspondiente a un conjunto de 36 variaciones para piano sobre este tema. Desde entonces este disco ha sido reeditado en numerosas ocasiones.31

En Irán, la melodía fue utilizada para una canción revolucionaria en idioma persa titulada «Barpakhiz» («Levantarse»), cuyo estribillo dice «Barpakhiz, kan ja az, Kakh banaye-e doshman!» («¡Levántate, extrae las fundaciones del Palacio del enemigo!»). El tema fue creado por los revolucionarios iraníes de izquierda durante la Revolución iraní de 1979.32

En Filipinas, la canción fue traducida libremente por la banda Patatag como Awit ng Tagumpay (que significa «canto de victoria»). Su estribillo en idioma tagalo dice «Hanay Tibayin ang, Gapiin ang Kaaway!» («Fortalecimiento de las filas, destruir a los opresores»), siendo una canción protesta cantada en las manifestaciones. La canción cierra un álbum de la banda titulado Nagbabagang lupa («Quemando tierra») publicado en 1986.33

En 1994, la banda francesa Mano Negra liderada por Manu Chao usó el estribillo de la canción en forma de sampler en su canción «Viva Zapata» que abre su último álbum de estudio, Casa Babylon.34

La frase del título de la canción ha sido en ocasiones reemplazada por revolucionarios, guerrilleros y anarquistas por «El pueblo armado jamás será aplastado»,35​ siendo utilizada esta versión por el grupo de punk chileno Los Miserables en su disco Miserables (1998) bajo el título «El pueblo unido».36

En 2002, el grupo español Ska-P lanzó la canción «Estampida» en su álbum ¡¡Que corra la voz!!, la que incluye un párrafo relativo a esta canción, e interpretada con una melodía semejante a la versión original.37

En 2004, esta canción fue parafraseada en la versión de una canción ucraniana llamada «Razom nas bahato, nas ne podolati» («Juntos somos muchos, no podemos ser derrotados»), la cual fue cantada en pleno auge de la Revolución naranja, siendo la canción representante de Ucrania en el Festival de la Canción de Eurovisión 2005.38

En 2007, durante las elecciones parlamentarias de Grecia, la canción se utilizó durante la campaña principal del partido de izquierda Coalición de la Izquierda Radical (SYRIZA), figurando en el mensaje televisado del partido, y siendo referenciado por varios políticos y activistas, así como en los medios de prensa durante los años sucesivos.3940

En 2008 se lanzó un álbum del dúo de DJ estadounidenses Thievery Corporation, titulado Radio Retaliation y que contiene la versión del tema «El pueblo unido», una versión inspirada en la original.41

Durante la Revolución tunecina de 2010-2011 que removió al presidente Ben Ali, los protestantes cantaron con el mismo ritmo de «El pueblo unido...» la frase «الشعب يريد إسقاط النظام» («El pueblo quiere derrocar al régimen»), dando inicio a la Primavera Árabe. Asimismo, fue cantada en la Plaza Tahrir de El CairoEgipto, el 25 de enero de 2011 llevando a las masivas protestas de 2011 que terminaron con la caída del presidente Hosni Mubarak.nota 1

En 2015, tras los buenos resultados del partido Podemos en las elecciones españolas, se cantó durante la concentración de celebración en la plaza Sánchez Bustillo, en el barrio Lavapiés de Madrid.42​ Tras los resultados de las Elecciones Generales de España de 2016 los representantes de Unidos Podemos han vuelto a cantarla.

Diversos otros músicos han interpretado esta canción en conciertos en vivo. La banda chilena Los Tres la interpretó en el Festival El Abrazo 2010,43​ y también lo han hecho Los Pettinellis y Legua York, así como el grupo punk estadounidense Anti-Flag, el cantautor alemán Hannes Wader, los italianos 99 Posse y Banda Bassotti, entre otros.nota 2

Quilapayún 1973 - El pueblo unido jamás será vencido [VIDEO EN VIVO]



Historia de la canción sacada de bbc.com

"El pueblo unido jamás será vencido": la historia del emblemático himno de protesta que vuelve a ser protagonista en Chile

  • Fernanda Paúl
  • BBC News Mundo

Con banderas de Chile y el puño en alto, decenas de miles de personas entonaron el viernes pasado en Santiago la emblemática canción de protesta "El pueblo unido jamás será vencido".

La escena ocurrió en Plaza Italia, el principal lugar de reunión de las manifestaciones en este país sudamericano que hace dos meses ha sido protagonista de una intensa revuelta social que exige mayor "dignidad" y terminar con los "abusos" del sistema político y económico actual.

Para muchos chilenos, que esta melodía vuelva a resonar en las calles del país tiene un potente significado.

Inevitablemente trae recuerdos de la época del presidente Salvador Allende, quien fue derrocado en 1973 por un golpe militar. Fue justamente por esos días cuando nació esta simbólica canción que más tarde se convirtió en un emblema mundial de lucha y resistencia.

Fin del contenido de YouTube, 1

¿Cómo nació la canción?

Transcurría el año 1973 en Chile y la situación política estaba extremadamente polarizada. El gobierno de la Unidad Popular, liderada por Allende, vivía momentos difíciles e incluso se rumoreaba la posibilidad de una guerra civil.Saltar Quizás también te interese y continuar leyendo

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Marchas, cacerolazos, paros y multitudinarias protestas eran la tónica de esos días.

Fue entonces cuando, en medio de la ebullición, el compositor y pianista chileno, Sergio Ortega, decidió crear una canción con el fin de participar de alguna u otra manera de lo que estaba sucediendo. Esto, con la colaboración del grupo musical folclórico Quilapayún, activo simpatizante y defensor de Allende.

El percusionista Carlos Quezada es uno de los históricos integrantes de la banda. Desde Francia -donde vive desde el 73, exiliado por el régimen militar de Augusto Pinochet- le cuenta a BBC Mundo parte de la historia detrás de "El pueblo unido jamás será vencido".

"La situación política chilena era grave. Ante esto, ¿qué podíamos hacer nosotros? Pensamos que responder a través de una canción que reflejara un espíritu mayoritario y pacífico era lo correcto", explica.

La primera vez que la cantaron -recuerda Quezada- fue solo tres meses antes del golpe y frente al palacio de gobierno de Chile -denominado La Moneda-, en el contexto de una marcha de mujeres "allendistas". Lo hicieron con el texto en la mano, pues no se sabían la letra de memoria.

Cuarenta y seis años después de aquel momento, Quezada no olvida la emoción que sintió:

"Fue muy emocionante. Nosotros nos defendíamos a través de canciones, era nuestra única posibilidad", dice.

"Sentíamos que teníamos la responsabilidad de generar conciencia en la gente, a través de la música, para evitar el infierno que de todas maneras llegó algunos meses después", agrega, en referencia al golpe de Estado del 11 de septiembre de ese año.

Además de "El pueblo unido jamás será vencido", Quilapayún creó otras diez canciones que tenían que ver con el momento político chileno. "Estábamos como en un juego de pin-pon, mientras se iba desarrollando el caos político en Chile, nosotros respondíamos con canciones", señala.

Exilio y repercusión internacional

Pero luego del golpe militar, todo cambió. Los miembros de Quilapayún tuvieron que vivir en el exilio durante los años que duró el régimen de Pinochet (17 años en total).

Las libertades en Chile se terminaron y, como era de esperar, la canción no volvió a resonar públicamente como antes. Esto no significó, sin embargo, que la melodía quedara enterrada con los recuerdos de la Unidad Popular.

La carrera musical de Quilapayún en el extranjero siguió con éxito y "El pueblo unido jamás será vencido" comenzó a contagiarse en varios países, especialmente en Francia, donde varios vivían en el exilio, y Alemania.

En varios de los conciertos que ofrecieron internacionalmente, el público les pedía terminar con esta canción. Así sucedió, por ejemplo, en Londres en septiembre de 1975, en medio de un tributo al cantautor chileno Víctor Jara.

"Siempre nos piden que terminemos con esta canción; llevo 50 años en la banda y creo que la he cantado más de mil veces", dice Quezada.

Así, poco a poco se fue convirtiendo en un himno de protesta mundial. Algo que no estaba para nada contemplado en los planes de Quilapayún.

"No la hicimos para que después se convirtiera en la canción emblema. La hicimos simplemente para que Chile no entrara en guerra civil porque hubiera sido un desastre", recuerda Quezada.

La canción sigue vigente hasta el día de hoy. De hecho, durante las recientes protestas de los "chalecos amarillos" en Francia, resonó en varias de las reuniones de los manifestantes. También ha pasado en otros lugares completamente alejados de Latinoamérica, como Irán.

En cuanto a Chile, volvió a escucharse una vez terminado el régimen de Pinochet.

Para el plebiscito, por ejemplo, Quilapayún participó en algunas de las campañas finales por el No, donde se tocó la melodía aunque no con la misma fuerza que antes.

Revolución y canciones

Salvador Allende decía que "no hay revolución sin canciones".

Carlos Quezada comparte esta afirmación. "Es una manera de reclamar más justicia. Ahora, en Italia, el movimiento de las sardinas se reúne y canta al unísono la canción 'Bella Ciao'. El pueblo siempre ha utilizado el canto para reivindicarse", apunta.

Algo de eso está ocurriendo hoy en Chile, no solo con el renacimiento de esta canción, sino también con la creación de "Un violador en tu camino", del colectivo Las Tesis.

"El arte y la cultura es lo que nos va a salvar finalmente. Y es así como siempre ha sido, cuando la gente se reúne para defenderse", opina Quezada.

El percusionista añade que para él es un "orgullo" que la melodía creada por Sergio Ortega se entone de nuevo.

"El pueblo unido está en el fundamento de este movimiento que se produjo en Chile. Me produce un placer enorme que se vuelva a cantar", dice.

"Hay muchas canciones que tú creas y que después se mueren solas. Hay otras que no sabes por qué se transforman en algo más de lo que tú pensaste. Y ese es el caso del pueblo unido", agrega.

¿Pero no es también triste que se cante ahora, después de tantos años? ¿No es un signo de que Chile está nuevamente sumido en una crisis social?

Quezada cree que no. "El pueblo, si está unido, por supuesto que es invencible. Y ese es el sentimiento que fue comprendido por mucha gente y es por eso que se la apropian", concluye.


Quilapayún 1975 - Canción final (Cantata Santa María de IQQ) [VIDEO EN VIVO]



y desde la web oficial del grupo, un extenso repaso a la carrera de Quilapayun:

Comienzos

"Al Pueblo sólo le falta
la tierra pa' trabajar
el Pueblo la está sembrando
y él tiene que cosechar"

Los orígenes de Quilapayún se remontan a 1965, cuando Julio Numhauser y Julio Carrasco invitan al hermano de este último, Eduardo, a integrar temporalmente un conjunto folklórico en ciernes. El trío, iniciado sin mayores pretensiones, comenzó a tomar forma, siendo bautizado con una palabra compuesta de origen mapuche, que le daría el sello a toda su carrera, "Quilapayún (quila=tres, payún=barbas). El estreno en sociedad del conjunto fue en la Peña de la Universidad de Chile en Valparaiso, allí dieron sus primeros pasos, guiados por Angel Parra, su primer director musical. Más tarde, a comienzos de 1966, y con la incorporación de Patricio Castillo, obtendrán su primer galardón, en el Primer Festival Nacional del Folklore "Chile Múltiple". Ya en este festival, se les puede distinguir por sus "calurosos" ponchos de castilla negro, con los cuales ganan su primer galardon "La Guitarra de Oro". Después de esta experiencia, se integrarían a las actividades de la itinerante peña "Chile Rie y Canta" de René Largo Farías, uno de cuyos frutos fue la grabación de un LP, en el cual Quilapayún participaría con la canción "El Pueblo" de Ángel Parra. Este será, entonces, el primer registro oficial del conjunto.

 

El destino, sin embargo, les tenía reservado un encuentro que marcaría definitivamente al grupo. En una de las peñas organizadas en Valparaíso se encuentran con Víctor Jara, sus caminos se cruzan y se mantendrán unidos por mucho tiempo más. A petición del conjunto, Víctor se hace cargo de la dirección artística, a través de la cual trabajará principalmente la disciplina, la puesta en escena y las temáticas de sus canciones. Es Víctor quien los presenta en Odeón, donde grabarán 5 LP. Su primer trabajo editado en 1966 se llamará sencillamente "Quilapayún", y en el incluirán composiciones de Ángel Parra, Víctor y del conjunto. A estas alturas ya se ha integrado Carlos Quezada (reemplazando a  Patricio Castillo en uno de sus constantes alejamientos). 

En 1967 graban con Víctor "Canciones folklóricas de America" y luego lo acompañarán en su disco solista de 1967, también bajo sello Odeón. Este año se retira Julio Numhauser por discrepancias en torno a la línea musical que debía seguir el conjunto y se integra el estudiante de Ingeniería Guillermo "Willy" Oddó quien, junto a Quezada, serán las voces características de Quilapayún por muchos años. Este año es el comienzo de las giras internacionales. Luego de pasar por Unión Soviética e Italia, se encuentran en Francia con el pintor y poeta Juan Capra, con quien graban para el sello Barclay el Lp "Juan Capra y los Chilenos", ya que legalmente estaban impedidos de aparecer con su nombre original bajo otro sello.

 

En 1968, Quilapayún es partícipe de la gestación del nuevo sello de la Jota (Juventudes Comunistas) y en él edita el LP "Por Vietnam", que se convierte rápidamente en un exito de ventas por su tematica contingente y por la consolidación estética y artística del conjunto. De este proyecto nace la famosa DICAP (Discoteca del Cantar Popular), que editaría cerca de 60 producciones hasta el 11 de septiembre de 1973 y que se convirtió en uno de los bastiones culturales de los artistas de la Nueva Canción Chilena. Este año se aleja del conjunto Julio Carrasco, quedando su hermano Eduardo como único miembro fundador. En reemplazo de Carrasco, Oddo integra a un antiguo compañero de la Universidad Técnica, Hernán Gómez y más tarde llega al conjunto Rodolfo Parada. Siguiendo con una fructífera producción, graban su tercer LP para el sello Odeon "Quilapayún 3".

 

Durante 1969, editan el LP "Basta", el cual incluye un clásico de su repertorio: La Muralla.  Además acompañan a Victor Jara en el LP "Pongo en tus manos Abiertas" y en el "Primer Festival de la Nueva Canción Chilena" donde interpretan “Plegaria a un labrador” tema que resultaría finalmente vencedor junto a "La Chilenera" de Richard Rojas. Sin embargo, los caminos de Victor y del conjunto se comienzan a separar, poniendo fin a 3 años de trabajo conjunto. Desde este momento la dirección artística y musical es asumida por Eduardo Carrasco.

 

El año 1970 el conjunto decide darle un giro a su carrera. Todo esto a partir de un trabajo con el compositor  Luis Advis, quien compone para ellos la que sería la obra más trascendente de la música popular chilena, "La Cantata Santa María de Iquique". Esta obra corresponde a una cantata clásica desarrollada en base a interludios y canciones, debidamente escritos y adaptados a instrumentos musicales folklóricos. Este mismo año, Quilapayún edita para el sello Odeón "Quilapayún 4".


 Los años de la Unidad Popular

"Venceremos, venceremos
Mil cadenas habrá que romper
Venceremos, venceremos
la miseria sabremos vencer"

Estos años simbolizan el período más contingente del conjunto. La elección de representar a la clase obrera y de incluir en sus temáticas las preocupaciones sociales en una expresión muy directa, los catapultan a un primer plano, convirtiendose en la voz principal del proceso socialista que Chile inicia en ese año. Después del triunfo de la Unidad Popular, en Septiembre de 1970, el grupo inicia una larga gira que lo llevará por Europa y se extenderá hasta Cuba. Su paso por la RDA permite la edición bajo sello Plane de su obra, además de grabar junto con Isabel Parra el trabajo conjunto "Lieder Aus Chile". Esta gira marca la partida de Patricio Castillo, cuya presencia en el grupo siempre fue más bien intermitente. De regreso a Chile, en Marzo de 1971, se integran a todo el proceso que tomará parte en el país.

 

Durante 1971, Quilapayún integra a sus filas a un joven ingeniero de la Universidad Catolica, Rubén Escudero, con el cual vuelven a transformarse en un sexteto. Este año editan una segunda cantata, "Vivir Como El". Esta obra, compuesta por Frank Fernández, y con arreglos de Luis Advis, es un homenaje al héroe vietnamita Nguyen van Troy. 

 

Durante 1972 se deciden a crear los "Talleres Quilapayún" que resultaría ser un semillero de futuros conjuntos folklóricos. Es así como se forman varios Quilapayunes que recorren el país con su música. Ahí nacen también los lolopayunes (semilla del grupo "Ortiga") y las quilapayunas. En estos talleres estaba Hugo Lagos, joven estudiante de música, quien es invitado a integrarse al conjunto, convirtiéndose en la guitarra solista del Quilapayún.

 

El año 1972 editan para el sello Odeón "Quilapayún 5", donde el grupo reafirma su búsqueda musical en forma paralela al trabajo más contingente. En esta producción aparecen temas como la "Cueca de la Libertad" (donde colaboran con otro compositor docto, Cirilo Vila), la interpretación de un Preludio de J.S. Bach y algunos temas alejados de las formas folklóricas como "Ausencia", compuesto entre Rodolfo Parada y Eduardo Carrasco y "El Vals" de Carrasco. 

 

Sin embargo, 1973 comienza con una polarización total del país, en vísperas de las elecciones parlamentarias de Marzo. En ese contexto el grupo tiene una accidentada y escandalosa presentación en el Festival de la Canción de Viña del Mar y, en el mismo período, graba sus canciones más contingentes, de las cuales se destacan "Las Ollitas" o "El Enano Maldito". Estas canciones serán editadas en singles y posteriormente en los LPs "No Volveremos Atrás" y "La Fragua". Este último trabajo corresponde a una cantata popular escrita por el compositor chileno Sergio Ortega, con motivo del cincuentenario del Partido Comunista Chileno, donde se sigue el hilo histórico de la lucha de clases en Chile, y donde el relato de los hechos le da un carácter épico.

 

En agosto de 1973, Quilapayún emprende una gira a Europa, la cual tiene como punto de coronación la presentación en el Olympia de París el 15 de Septiembre y con fecha de retorno para el 24 de ese mes. Cuatro días antes del estreno, Quilapayún es sorprendido con la noticia del Golpe. De pronto, el grupo tiene el exilio en sus narices y la necesidad de replantearse.


El Exilio

"Patria, luz y bandera
de los puños alzados
volverás a florecer
volverás a renacer"

El Golpe Militar sorprende al conjunto en Francia, país donde deciden radicarse, y desde el cual inician una serie de presentaciones en solidaridad con la causa chilena. Estas actuaciones se extenderán por 2 años y los llevarán a recorrer todos los continentes. A comienzos de 1974, Rubén Escudero decide partir del grupo, ante lo cual llaman a Guillermo García, músico que había formado parte de los Talleres desarrollados en 1972.

En 1975 por fin vuelven a los estudios de grabación, componiendo otro de sus discos clásicos "El Pueblo Unido", el cual incluirá la canción homónima que rápidamente se convertirá en un himno de lucha en todos los pueblos del mundo. A este disco le seguirá el LP "Adelante", en el que la mayor parte de los integrantes del grupo asumen la labor de composición, fruto de una suerte de taller interno que realiza Eduardo Carrasco (en el LP figuran trabajos de Willy Oddó, Rodolfo Parada, Hernán Gómez y Hugo Lagos).

En el año 1976, sale al mercado el LP "Patria", y posteriormente, bajo sello MoviePlay, el trabajo colectivo "Desde Chile Resistimos Vol. I", el cual incluyó canciones anónimas escritas en Chile y enviadas al extranjero para ser interpretadas por los artistas en el exilio.

En el año 1977 editan la antología "La marche et le drapeau", disco doble que rescata varias de las canciones editadas antes de 1973 junto con otras composiciones inéditas. Además, graban su primer LP en vivo, llamado "Enregistrement Public" fruto de los conciertos en el "Theatre de la Ville" el 5 y 6 de Enero de 1977.

En 1978, Eduardo Carrasco decide retirarse de los escenarios para focalizarse en el trabajo de la dirección y composición, integrándose al grupo en su reemplazo Ricardo Venegas, geólogo y músico, quien se había relacionado con Quilapayún desde principios de los '70 cuando se integró a los talleres que organizó el grupo. Este mismo año graban la segunda versión de La Cantata Santa María, con relatos en francés de Jean Louis Barrault y la traducción y corrección de textos por Julio Cortázar.

En el año 1979 Quilapayún esboza lo que será un cambio en su concepción artística. Políticamente, se alejan del P.C y comienzan la gestación de lo que será su nuevo ideario, el de "La Revolución y las Estrellas". Bajo este contexto editan el LP "Umbral", en el cual aparecen dos importantes influencias para el nacimiento del nuevo Quilapayún: Roberto Matta y Gustavo Becerra. En este disco aparecen dos canciones simbólicas de la nueva etapa: el "Discurso pronunciado por el pintor surrealista Roberto Matta..." y la cantata "Américas" con música de Gustavo Becerra sobre texto de Neruda .

En 1980 editan el LP "Alentours" y más tarde "Darle al Otoño un golpe de ventana para que el verano llegue hasta Diciembre". Este año también participan en el programa francés "Grand Echequier", el espacio más importante de la televisión gala en esa época, que tuvo una edición dedicada completamente al grupo y en el cual comparten escena con el pianista Roberto Bravo, Juilette Greco y Julio Cortázar. Nota aparte merece la escenografía confeccionada por el pintor Roberto Matta.

En 1982 editan "La Revolución y las Estrellas" con el cual sellan su nuevo proyecto musical. En este disco se afianzan las composiciones personales del conjunto. Este mismo año se integra Patricio Wang, joven compositor chileno, quien sin embargo tenía a su haber una vasta trayectoria musical. La incorporación de Wang será fundamental en la composición y posteriores arreglos de los temas.

Durante 1983 realizan una exitosa gira de regreso a Argentina, que quedará registrada en un disco doble a partir de sus presentaciones en el Luna Park de Buenos Aires, los días 23, 24 y 25 de Noviembre. Además, en ese año publican el LP "Chante Neruda" con el que el grupo conmemora los diez años de la muerte del poeta.

En 1984 editan el LP "Tralalí -Tralalá" el cual incluye el clásico "Es el colmo que no dejen entrar a la Chabela" y el "Oficio de Tinieblas por Galileo Galilei", donde se manifiesta el trascendente aporte de Wang a la reinvención musical de Quilapayún.

El año 1987, editan "Survarío" en el cual se estrecha la relación de Quilapayún con los poetas contemporáneos (Guillén, García Lorca, Huidobro y Alberti). Posteriormente, uno de los puntales del conjunto,  Guillermo Oddó decide alejarse del conjunto, con lo que el grupo se convierte nuevamente en un septeto.

En 1988 vuelven a  trabajar con el compositor Luis Advis, en la creación de la sinfonía "Los Tres Tiempos de América". Para este trabajo, incluyeron la voz de Paloma San Basilio. Este año también marca el esperado regreso de Quilapayún a Chile. En los días previos al plebiscito, se presentan en la concentración final de la campaña del “No” en la Panamericana ante un millón de personas.

En el verano de 1989, Quilapayún retorna a Chile con una gira nacional. Cinco funciones en el Teatro California (del cual se registra un casette doble "Quilapayún en Chile"), un recital en el Estadio Santa Laura y actuaciones en Valparaíso y el sur del país. Este año también marca el alejamiento del director del grupo Eduardo Carrasco. Desde ese momento la dirección artística quedará en manos de Rodolfo Parada y la dirección musical será responsabilidad de Patricio Wang.

Los alejamientos

"Presente y lejana
la esencia del motivo
el comienzo, la memoria
la raíz de la luz y del amor
¡es siempre frágil la constancia del volver
voz y lágrima!"

De regreso en Francia, luego de su gira por Chile, el grupo se replantea su nuevo horizonte musical. Esto, los proyectos personales de cada integrante del grupo, y la ausencia de una casa disquera que los edite, debilitan notoriamente la continuidad y trabajo del conjunto.

En 1991 un hecho trágico enluta la vida del Quilapayún. En el centro de Santiago muere asesinado Guillermo "Willy" Oddó. Hasta esa fecha, y desde el retorno de la democracia a Chile, Guillermo se había desempeñado como asesor cultural de la Municipalidad de Santiago. Esto hecha por tierra las ansias de los seguidores del conjunto, en volver a ver en el escenario la formación más recordada de Quilapayún.

En 1992, luego de un silencio de 4 años, editan el LP "Latitudes" bajo sello DOM. Este lanzamiento se suma a la reedición en Francia de parte sustancial de su discografía, por parte de la misma casa discográfica. Ese mismo año se retiran del conjunto, por diferencias con su dirección, Carlos Quezada y Ricardo Venegas. En su reemplazo se integran Daniel Valladares (proveniente del conjunto Ortiga y participante de los talleres del Quila) y Patricio Castillo, quien retorna al conjunto despues de 22 años. Este año re-estrenan en la Unesco la Sinfonía "Los Tres Tiempos de America" con la participación de la holandesa Winanda Van Vliet.

En marzo de 1994, Quilapayún recibe la distinción de la OEA y el Consejo Interamericano de Música en su máximo grado, la cual celebran con una presentación en Washington.

Al año siguiente, Quilapayún nuevamente es condecorado. Esta vez corresponde a la orden al mérito “Gabriela Mistral” entregada por el Ministerio de Educación de Chile, en una presentación realizada en la Embajada de Chile en Francia. El mismo premio se le entregó meses después en Chile a algunos integrantes históricos (Eduardo Carrasco, Ricardo Venegas, Carlos Quezada y honoríficamente a Willy Oddó).

Durante la primera mitad de la década de los noventa, la actividad del grupo es prácticamente nula. Más allá de las actividades puntuales enumeradas más arriba, la presencia en los escenarios del grupo se vuelve muy esporádica o nula como ocurre entre los años 1995 y 1996, dedicándose cada uno de los miembros a sus proyectos personales.

Luego de casi 8 años de ausencia, en 1997 el conjunto vuelve a Chile tres veces. En la primera visita realizan presentaciones en Viña del Mar, Valparaíso, el Court Central del Estadio Nacional de Santiago y en el Festival del Huaso de Olmué. Durante la segunda visita, hacen dos shows en Santiago y uno en Iquique, además de participar en un estelar televisivo. En noviembre, presentan el espectáculo "Quilapayún en dos tiempos", compuesto por la Cantata Santa María más 15 canciones esenciales, que es presentado en Santiago (dos días en el Teatro Monumental), en la Quinta Vergara y en la salitrera Santa Laura de Iquique. Antes de regresar a Francia, también actúan en Buenos Aires, donde se presentan en "La Trastienda".

En 1998, Rodolfo Parada firma contrato con el sello Warner, para la reedición en Chile de gran parte de su catálogo, junto con la edición de nuevas compilaciones y discos de estudio. Entre estos trabajos se encuentra el disco doble "Antología", que resulta un éxito de ventas.

En 1999, retornan a los estudios después de 7 años para sacar el trabajo "Al Horizonte". Con este trabajo bajo el brazo vuelven a Chile a finales de año para hacer una única presentación en el estadio Víctor Jara (ex estadio Chile) con una escasa concurrencia de público.

Crisis y Reencuentro

"Siempre
Soltando al viento las amarras
Encabritando el entusiasmo
Del poncho negro y la guitarra
"

El año 2001 comienza a hacer notoria la crisis interna que vive el conjunto, producto de diferencias respecto a la dirección del conjunto. Esto motiva el alejamiento temporal de Guillermo García, quien tras esto inicia su trabajo solista. En su reemplazo, el conjunto incluye la presencia esporádica de Mario Contreras y más tarde, en forma definitiva a Alvaro Pinto. El conjunto en tanto no realiza actividad de interes.

 

Durante el año 2002, Rodolfo Parada firma con el sello PICAP, con lo cual relanzan gran parte de su discografía en España. Esto, junto con el lanzamiento en Francia, bajo DOM, de "Al Horizonte", ha permitido que Quilapayún retornara a los escenarios europeos durante el 2002, con  en Francia y España. En Septiembre se presentan en Francia, en Ville de Cergy, y en España, en el Teatro Gayarre de Pamplona, en Noviembre. Ese mismo mes, pero en Chile, Eduardo Carrasco y Ricardo Venegas, integrantes históricos del conjunto, realizan una sencilla pero emotiva ceremonia en el Cementerio General, recordando los 11 años del fallecimiento de Willy Oddó.

Hacia fines de año la crisis del conjunto se vuelve insostenible, y como resultado de ella se separan de la dirección de Parada Hugo Lagos y Hernán Gómez, integrantes fundamentales de Quilapayún con más de 30 años de permanencia cada uno.

 

El año 2003 comenzó con un concierto en el Palau de la Múscia Catalana , de Barcelona, para lo cual se integran de emergencia al conjunto Marcelo Veliz y Cristián Goza. Con esta nueva formación, la agrupación dirigida por Parada,  continua desarrollando presentaciones en Madrid, México e Israel.

Por su parte, los antiguos integrantes se reagrupan en torno a la figura de Eduardo Carrasco, quien refunda el Quilapayún, e inicia una campaña para colectivizar la marca que había sido registrada por Rodolfo Parada a titulo personal en 1998. Como resultado se tienen dos conjuntos paralelos. El radicado en Francia, dirigido por Rodolfo Parada, y el refundado desde Chile, dirigido por Carrasco, y que integra en sus filas a Guillermo García, Hernán Gómez, Hugo Lagos, Rubén EscuderoRicardo Venegas, Carlos Quezada e Ismael Oddó (hijo de Willy Oddó). Ambas facciones inician acciones legales, en Chile y Europa para mantener los derechos sobre la marca. Entre tanto, ambos grupos programan presentaciones en Chile y el extranjero, lo que dará como resultado, la existencia de dos conjuntos actuando bajo el mismo nombre, en distintos escenarios del orbe.

Las posiciones y argumentos de ambas facciones, pueden entenderse leyendo los comunicados que cada postura ha hecho llegar a a la opinión pública. En Junio de 2003, desde París se emite un primer comunicado desvirtuando la reagrupación liderada por Carrasco. La respuesta de la otra facción es emitida en Julio del mismo año. Finalmente, en Septiembre es emitido un segundo comunicado desde París, bajo el titulo de "Elementos de Juicio".

Durante el mes de Agosto, el sello PICAP edita un CD doble, que reune los mejores momentos de la presentación del Quilapayún liderado por Rodolfo Parada en el Palau de Barcelona. También se anuncia la edición en DVD de este recital. En Chile, ese CD será editado con baja repercusión en Noviembre del mismo año, bajo sello EMI.

Durante el mes de Septiembre se produce el reencuentro en el escenario del Quilapayún, liderado por Eduardo Carrasco. Primero con su participación en el Homenaje a Allende en el Estadio Nacional de Chile, y posteriormente con los conciertos ofrecidos en Talcahuano, Teatro Teletón de Santiago y la Quinta Región. A estos conciertos, les siguieron presentaciones en Inglaterra, Francia y posteriormente, en Noviembre, en el multitudinario festival "Todas las Voces, todas" desarrollado en Ecuador. Por su parte, la facción gala reduce notablemente sus presentaciones hacia finales de año, presentándose en el Zócalo de Ciudad de México, en un homenaje a Allende, y en Octubre en Madrid, compartiendo escenario con Ana Belén.

 

En Enero de 2004, finalmente es editado en España el DVD "A Palau", que contiene los mejores momentos de la presentación de la facción francesa, un año atrás, en el Palau de la Música de Barcelona. en Chile, este trabajo no puede ser editado debido al conflicto por la marca. Por otro lado, durante Enero y Febrero, la facción chilena de Quilapayún realiza varios conciertos en en Bélgica y Francia.

En Abril se conoce el Fallo del Departamento de Propiedad Intelectual, el cual rechaza la solicitud de registro por parte de Rodolfo Parada, dando con ello la razón a los querellantes (Carrasco, García, Gómez, Lagos, Venegas, Escudero, Quezada, sucesión Oddó).

Durante Junio y Julio ambas agrupaciones se mantienen activas. Mientras Parada y su facción realizan presentaciones ocasionales en algunos puntos de España (entre ellos Ceutí), el Quilapayún refundado de Carrasco se sigue presentando en algunas localidades de Francia.

Es Agosto y los Quilapayún, luego de una presentación en Francia, viajan Quito, donde presentan la Cantata Santa María de Iquique. Posteriormente se unen a los Inti-Illimani Históricos (formado por Salinas, Durán, Séves y Ball,  los cuales también mantienen un litigio por el uso de la marca con la formación liderada por Jorge Coulon) con quienes realizan sólidas presentaciones en Valparaíso, Buenos Aires y tres intensas jornadas en Santiago de Chile en un espectáculo denominado "INTI+QUILA".

En Agosto también es publicado el DVD y el CD doble El Reencuentro, que rescata las presentaciones que hiciera el conjunto en el Teatro Teletón en Septiembre de 2003. El DVD también incluye un documental con entrevistas y registros del reencuentro de los integrantes históricos.

En septiembre de 2004 fallece el destacado compositor Luis Advis, enlutando nuevamente al Conjunto y a toda la música popular chilena.

 

El año 2005 comienza con una nueva presentación de la formula Inti+Quila en el Estadio Víctor Jara de Santiago, bajo el título de El Canto de Todos, presentación que es seguida de actuaciones en el Norte y Sur del país.

El jueves 2 de Junio se emite el Fallo del Tribunal de Gran Instancia de Parísque anula el registro comercial del nombre "Quilapayún" que había realizado a titulo personal Rodolfo Parada en 1998. Inmediatamente se emiten comunicados, Rodolfo Parada y Patricio Wang desde París, como de los Quilapayún históricos desde Chile, interpretando el fallo.

En Julio es editado el CD La Vida contra la Muerte, que reúne los temas del disco inédito en Chile "Donner a l'automne un coup....", más un conjunto de temas no difundidos del conjunto.

Sin embargo, el evento más importante corresponde a la celebración de los 40 años del conjunto. Esta celebración, como es obvio se realiza sobre el escenario, con una intensa agenda que los trae de vuelta a Santiago, donde realizan dos aplaudidas presentaciones en el Teatro Providencia. Más tarde, junto a los INTI Históricos, se presentan en Perú, Ecuador, Holanda, Italia y Francia, donde actúan con llenos totales en el Teatro Le Trianon, Saint-Yorre, Mont-de-Marsan y Lemoges.

Por su parte la facción liderada por Rodolfo Parada, realiza esporádicas presentaciones en localidades de Francia e Italia, también celebrando los 40 años del conjunto.

Ha finales de año es editado el CD y DVD Música en la Memoria, que reúne los mejores momentos de los conciertos realizados a mediados de 2004 por Quilapayún e Inti-Illimani histórico.

 

El año 2006 comienza con presentaciones de Quilapayún en conjunto con el Teatro Aleph, montando la obra musical "Neruda, la poesía no habrá cantado en vano". Dado el éxito de esta obra, se programan nuevas presentaciones para mediados de año.

Este año también Quilapayún edita un CD compilatorio La Fuerza de la Historia que rescata temas inéditos o de escasa difusión durante la etapa del conjunto, como la Cantata Vivir como El, EL Banderon, Ramona y Quiaqueñita.

 

Durante el año 2007, centenario de la matanza de la escuela Santa María de Iquique, Quilapayún realizara cerca de 20 presentaciones, entre Chile, España, Canadá y Francia. Todo parte en Julio con una presentación en Domalain para luego llegar en Agosto a Chile y presentar la Cantata Santa María de Iquique junto a selectas orquestas juveniles de la zona sur del país. Las presentaciones tuvieron lugar en La Pintana, Concepción, Temuco, Talca, Viña del Mar y Santiago abarrotando el Teatro Monumental.

Paralelamente a estas presentaciones, Quilapayún edita un nuevo trabajo en estudio, "Siempre", disco que reúne 14 nuevos temas, entre los cuales se destacan A California me voy, Quita Hurpillay, Palabras de Amor y Cueca larga de la Nueva Canción Chilena, una de las últimas composiciones de Luis Advis antes de fallecer.

En Octubre realizan varias presentaciones en Francia y luego retornan a Chile, esta vez para recorrer la zona norte, pasando por ValparaísoCopiapó, Iquique y un show especial en la comuna de San Joaquín en Santiago, ante más de 5000 personas. Junto con esto, Francia condecora a Eduardo Carrasco, nombrandole Caballero de la Orden de Artes y Letras, en una emotiva ceremonia en la embajada francesa en Santiago.

Finalmente, en noviembre, vuelven después de 20 años a Canadá y se presentan en Montreal, Kitchener Toronto.

 

El año 2008 comienza con muy buenas noticias para los históricos integrantes de Quilapayún. En un Dictamen definitivo, la Quatrième Chambre de la Cour d'Appel de Paris le prohíbe a Rodolfo Parada y su agrupación, seguir actuando bajo el nombre de Quilapayún, con lo que se cierra la disputa que durante los últimos años había enturbiado la destacada carrera artística del conjunto.

En lo musical, este año resulta uno de los más agitados de la última década, con cerca de 30 presentaciones en varios continentes. Todo comienza con la gira "El Reencuentro" que los llevo a recorrer 10 escenarios franceses entre Enero y Febrero. En este último mes vuelven a visitar Suecia. Más tarde visitaran Barcelona, pero será el Reencuentro con México lo que marcara el punto más alto de la gira. Durante Julio también participarán del Festival Internacional de Palestina y viajaran a  Nicaragua para participar en un acto multitudinario de celebración de la revolución sandinista.

Hacia fines de año, con motivo de la celebración del natalicio de Salvador Allende, Quilapayún participa en el multitudinario espectáculo "100 años 1000 sueños" en el Estadio Nacional de Chile y luego en Francia, junto a Inti-Illimani Histórico y Paco Ibáñez, montan el espectáculo Le Reve Existe.

 

El año 2009 comienza con presentaciones en Chile y España y un emotivo reencuentro con Mendoza. Además, Quilapayún prepara para mitad de año lo que será su nuevo Disco de estudio, titulado "Solistas".

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